HYPERVERSOS - AÑO UNO - RECITAL COMPLETO FORO HILVANA AGOSTO 2016
HYPERVERSOS
QUEBRANDO LA POESÍA A NOTAS Y VERSOS
5 oct 2016
HYPERVERSOS - NADA MÁS TRISTE QUE VER A UN HOMBRE LLORAR
HYPERVERSOS - NADA
MÁS TRISTE QUE VER A UN HOMBRE LLORAR
Fue entonces que el hombre no volvió la
mirada y se fue así arrancándose las uñas, una por una, de una vez por todas,
no necesitaba ya las manos, quiso borrarse la boca, romperse las piernas,
incendiar lo que le quedaba de alma, inundar lo que le sobraba de vida, mirarse
al espejo y saber que ha perdido, escucharse a lo lejos y pensar que se ha
extraviado, fue entonces que el hombre hundió la cabeza entre las piernas, la
cobijó en sus brazos y no quiso volver jamás.
No hay nada peor que ver a un hombre llorar,
Agazapado, abstraído, destrozado, mal herido,
Con los pies llagados y la sangre galopando,
La mano lastima el abdomen repetidamente
Una más, una vez más, otra más, otra más,
una más, una vez más, otra más, otra más.
No hay nada peor que ver a un hombre llorar,
le decía a mi padre en el funeral del mundo,
no dejes que el rocío decante por nada
amargo,
la vida es estúpida y por eso se marcha sin
vuelta,
el mundo está lleno de estorbos y quimeras,
desvaríos que no llegan a ningún lado,
aberraciones que vienen de cualquier parte
para qué llorar si sigues en pie para poder
llorar.
No hay nada peor que ver a un hombre llorar,
finge que Dios existe, deja que cargue tus
culpas,
ora al santo por el que otros matan y violan,
deja por un momento de llamar ramera a la
virgen,
y jódete sólo, mese tu mano ahora hasta tu
pecho.
Una más, una vez más, otra más, otra más,
una más, una vez más, otra más, otra más.
No hay nada peor que ver a un hombre llorar,
se decía el viejo invalido y con hambre,
con los dientes rotos, con la ceguera a un
paso,
con el alma en las manos y la piedad en el
olvido.
No hay nada peor que ver a un hombre llorar,
mientras otro aspira cocaína y él no tiene
alas,
mientras la soga carga su pesar vagabundo,
mientras su cien responde mil preguntas antes
del bang,
mientras su mujer se acuesta con un testigo
del juicio,
mientras sus hijos no son sus hijos y le
aborrecen,
mientras en espejos se dibuja su rostro
puerco y desnudo,
mientras se acaricia y sin embargo sabe que
está podrido,
mientras acerca su mano al torso y todo
parece lastimoso,
mientras su ropa se humedece de sangre y sabe
que ha perdido,
mientras la mano llega hasta el cuello y hace
de soga con filo,
pincha una vez, pinche otra vez, y luego otra
vez,
una vez más, una más, una vez más, una vez
más, una más.
No, no hay nada peor que ver a un hombre
llorar.
16 mar 2016
HYPERVERSOS - TIC TAC
HYPERVERSOS - TIC TAC - EL GARAGE PRESENTA
Tic tac, tic tac, tic tac, tic tac, tic tac.
Era lunes y tenía ganas de volarme la cabeza,
confío en que no sea un gusto efímero
y a la menor intención pueda arrancármela
es este crudo mundo que no es más mío
que a nadie pertenece, y está ahí solo, en
llamas.
Tic tac, tic tac, tic tac, tic tac, tic tac,
Sirvamos al presente con una ofrenda,
una vida que sepa a muerte y madure,
que no tienda a quebrarse, que hable rojo,
que tenga el pecho árido, que no escape,
digamos que es nuestro único bastardo,
que suele ser semilla en vez de madero,
que ha huido de las sombras y se cree luz,
que busca sin siquiera encontrar el sendero,
una mano firme que se alza y es clavada
con la otra erotizándose a honor de la cruz.
Luego
entonces al tercer día cae de bruces
y
predice que el mundo se va directo al vacío,
es ahí
cuando la mierda humana alza la mano otra vez
y
desata una suerte de paraísos con costo y desvarío.
Quién se ha llevado mi corazón de queso,
dónde están mis manos de mimbre,
tic tac, tic tac, tic tac, tic tac, tic tac.
mira nada más la fiebre que tengo,
todo arde y se estampa, cuanta hambre,
está sed, mis piernas son de palo seco
no andan más, han venido a menos,
y tú sólo escuchas que ya soy cadáver.
Estoy muerto y ahora te lo confieso,
he partido de hace tiempo para obviar
que mi corazón no es ni parecido al queso,
que me he plantado en medio de la guerra
la que no es de manos y también apesta, la
que perdí
y la que hace a veces de pantano, el mío.
Soy de los que confunden el ocio y la
belleza,
la hilaridad con la elocuencia y la decadencia,
a Cristo con Satán a éste con el verbo y el
infinito,
he nacido sin la miseria del pecado original
desconozco el perdón cuando no es mujer,
Y el mañana cuando el futuro me importa nada.
Son esos días en los que la ciudad se
espanta,
los fieles gozan ante la caída de la palabra,
entonces los juicios se hacen más ásperos
a la mirada nativa de la multitud en ruina,
allá lejos algo grazna y a falta de cuervos
somos nosotros los que no decimos nada.
Tic tac, tic tac, tic tac, tic tac, tic tac.
A dos minutos de la derrota voy cargando a
Jesucristo,
la fiereza de la culpa que ha resultado un
éxodo
2000 años me ha punzado la costilla, se
colapsa la garganta,
esta sed avinagrada de la que sufro y sigo
feligrés,
el demonio de la apócrifa verdad en las manos
de un pederasta,
el perdón efímero en la boca de un
representante de Adán,
igual viola, igual mata, igual de infame y
canalla va de blanco,
camina detrás de la caravana, toro indultado
sin sangre,
perro rabioso y salvaje, va tu palabra a la
pesadez humana,
los débiles que piedad imploran comprándote
un nudo para su garganta.
El estúpido día en que descubrí el mundo
fue cuando después de llorar no había
consuelo,
las calles estaban húmedas, la ciudad
ensangrentada,
las manos de mi madre parecían rotas,
cansadas,
todos a mi paso gritaban, las mujeres
callaban,
los niños de mi edad eran violados por negras
sotanas,
desde el palco un cuello almidonado y asesino
miraba,
las manos cruzadas, las bocas cerradas, las
palabras
eran sólo eso, puras palabras que no
hablaban.
Hoy sigue siendo lo mismo, he crecido, he
vivido
y la ciudad aún en llamas.
12 minutos, 13 minutos, tic tac, tic tac,
sigo sin nada, no tengo nada,
te tengo a ti y aún sigo sin nada,
tic tac, tic tac, sexo, coca, whisky,
tic tac, mi madre está pariéndome,
soy un libertino, orino en la calle,
el metro pasa, tic tac, tic tac,
quiero convertirme en santo,
en un santo homosexual,
en Dios femenino, en crack,
en hachis, en una boca rosa caramelo,
tic tac despierto, duermo, bebo,
sexo, putas, bebo putas, sexo duermo,
una consonante, y todo suena a
a tic tac, tic tac, tic tac, tac, tac, tic
tac, tan
HYPERVERSOS - CONDENADOS
HYPERVERSOS - CONDENADOS - TEATRO ERNESTO GÓMEZ CRÚZ
CONDENADOS
Si he de morir un día que sea en el sitio
merecido, ese que te acusa tanta belleza, ese que es Olimpo, esa hendidura en
que se halla Hades e Infierno, y cuando toca la boca vuelve Paraíso.
Nos hemos encontrado, tanto como hemos
pretendido y todo viernes es de faena y no paramos hasta salir lacerados y el
sólo andar sea un suplicio, luego otra vez nos encontramos para sanarnos,
lamiendo las heridas, abrazando nuestros vicios, haciendo que amamos olvidando
lo que hacemos, figurando que somos bravos y que mutuamente devoramos lo que se
haya en nuestros cuerpos, de eso va la vida, la que nos juramos, de la que
somos animales y testigos.
Parece que la ciudad nos abandona o es a
nosotros a quienes no nos importa.
Llega la hora y tú idolatras ese collar de
perlas que te he forjado que se va desdibujando y rueda presuroso entre tus
pechos, sabe de tu ombligo, ese es su lugar y por las mañanas también el mío.
Moríamos de hambre o de sed o de pena,
moríamos de cualquier cosa pero no de amor, éramos la jauría entera, y sólo
necesitábamos ser dos para que esta ciudad hablara de nosotros y se precipitara
en llamas y entonces no había diferencia entre nuestra cama y lo que sucedía
afuera, el mundo ardía, nada nos importaba, el hambre seguía sin espantarnos,
morir de inanición era dejar de estar furiosos y quitar las manos de las brasas
que en medio de nosotros se estaban consumando.
Todos los viernes ella escondía el mar, y
luego me pedía que lo escuchara a través de su vientre, yo me colgaba por
horas, le cantaba versos, le hablaba despacio, llenaba de vaho el sitio y
dibujaba corazones descompuestos, ilusiones rotas y el nombre de nuestros
errores, fuimos perfectos.
Te miraba tendida, y no hacía más que
acariciarte las piernas como si tuvieras 20 años, me escondía bajo tu falda y
ahogaba la palabra, hubiera mentido al decirte que tarareaba nanas, para nada,
hubieran tenido que lavarme la boca por obsceno o excomulgarme del mundo
cristiano, cuántas cosas sucias pronunciaba, cuantas alevosías en nombre de
Dios, del Dios bajo la falda, era como un río que en mi boca se desmadraba, un
Partenón en que me batía siete días a la semana.
Qué faenas mujer, cuánta carne, es imposible
que sigamos vivos, deberíamos de estar exiliados por sensuales, lapidados por
deliciosos, condenados por tentarnos tanto, somos como esa culpa adolescente,
contamos hasta cien y otra vez nos estorban las manos, nos sobran las bocas y
nos falta tantita divinidad, tú siempre virgen, yo siempre inhiesto.
Pender de esos pechos con olor a corazoncitos
perfumados, salir de la guarida para quitarle al mundo la condena del pecado, y
tragarlo, así arrepentidos y perdonados nos iremos sin costillas que definan
nuestro sexo, sin manzanas que nos compren lo exquisito, un detalle lechoso y
algodonado en tu nombre y dos ladrones al costado, por qué no, también amando.
En el
principio estabas ahí y eras, y yo parecía un desorden y estaba vacío, te
acercaste a mi oído y creaste la marea, sea la ventura y la ventura nos arropó
pronto dejando de ser cadáveres expuestos, sean las bocas y las nuestras
comenzaron a juntarse desesperadamente, pero las bocas necesitaban de una
lengua, y ésta apareció de tajo, con la consigna de encarnarse a la opuesta,
luego manos, piernas, torso y durante 5 días más te centraste en los sexos,
muestra de la perfección que a semejanza tuya se regala, sí, he considerado
desde hace muchos besos que eres Dios.
He considerado también desde hace mucho sexo
que eres Dios, no el de los fanáticos, tampoco al que desafían los ateos, no,
eres ese Dios que compuso un milagro entre nuestras piernas, el que nos hizo
hermosos, radicales, amantes hambrientos, el que se posa en mis costillas y
aduce que estaremos respirándonos tanto tiempo, yo a tu diestra nomás mirando y
de vez en diario pendiendo de tu vientre ansioso, famélico.
Dos son las cosas en que pienso todo el día,
la primera eres tú aunque tú no eres una cosa sino todas las cosas y la segunda
es en lo que te voy a hacer encima de las sábanas, debajo de ellas, en medio de
esta vida, a la vuelta del minutero, tomarte porque te pertenezco, allá la
ciudad nada nos extraña, Dios nos olvidó por habernos compartido tanto, por
comer pan de nuestro cuerpo y beber de esa sangre que te emana y que ha sido
vida, nos desterraron y ahora estamos tan ebrios.
Mujer, hágase tuya la voluntad igual ardemos
en tierra, igual ardemos de infiernos.
18 ene 2016
HYPERVERSOS - DESENCANTADOS
HYPERVERSOS - DESENCANTADOS - CASA DEL LAGO
Desencantados
Aún recuerdas cómo era la lluvia, las
tempestivas emboscadas, el sabor de la carne, la cama, la casa y todo lo que
nos necesitaba, tengo que decirte algo, cualquier cosa pero esta vez por última
iniciaré con la verdad.
Aquí voy, dejando que
mi esqueleto controle mis impulsos, el corazón se ha ido bien lejos tal vez a
la mierda o a esos rincones que se conocen cuando muere alguien y no quieres
evitarlo, he tomado varias decisiones y tú no fuiste una de ellas, llegaste
como llegan esas tardes absurdas de cine y café, donde no se bebe porque se
debe amar con elocuencia, como si por descorchar un par de botellas se nos
negara el cielo o la tierra, eso es para los imbéciles que creen que el futuro
los espera con las piernas abiertas y usan gafas pastosas y barbas abultadas
que no combinan con su bragueta, llegaste a tientas con un bolso muy rojo y un
vestido que no importaba yo quería la carne, restregarte mi inocencia flaca,
causar en tu cuerpo tantos accidentes como me fuera posible.
Cada
día pedías más delicadeza, tu delirio de crisálida me esperanzaba mariposa en
cautiverio, con alas que combinaran con tus ganas de nada o con tu cabello
lleno de Europa y un montón de antioxidantes y químicos que no alteran la
conciencia y a ti, a ti te llenan de ansias, hablar era tu palabra favorita,
escupirme la cara con todas esas molestias que generan las relaciones serias y
un poco más tarde besarme los ojos hasta quedar dormido, me mantenías con el
rostro metido en tu pubis fino por horas y a lo dos días de inanición me
regresabas a esta ciudad en llamas.
Ahora estoy seguro que conoces cómo inicia la
tormenta, nos llenamos de tantos agostos innecesarios, casi al final teníamos
el semblante de años que ya pasaron y sin embargo siempre fui capaz de mirarte directo,
podía estar ebrio o haberme fumado la mitad del color verde que cobija a este
insano mundo, pero te miraba igual que cuando tenías 20 y besabas de forma
escandalosa y la gente hablaba de ti y yo sin defenderte, todo lo contrario, en
ocasiones confirmaba que nos amábamos de forma sucia, que no parábamos 2 días
enteros hasta mirar el rojo de nuestros sexos y hasta ese entonces nos
lavábamos sin culpa, y volvíamos a caer en nuestra sordidez 2 días más, la
gente siempre es una estafa.
Nos
fuimos marchando por partes, primero los sexos y luego lo demás que nada
importa ahora, puedo mirarte pero siempre me da esa nausea de olvido, de
pasado, de recuerdos flojos o rotos o que no recuerdan porque no lo quieren
así, me fui hace tiempo sin que lo notarás, no era de noche, tampoco fui por
cigarrillos, me largué con unas perras, sí, unas perras ganas de burlarme de todo este cuento colorín y
descolorado, donde funges como inocencia y causa, como victima de un canalla barato, la mujer que inició
invitándome a habitar su falda y paso a ser aquella de las lágrimas de cristal
sin estallido, la de los pecho firmes y bragas de hojalata.
Estamos a mitad de un diluvio que no
contuvimos aunque teníamos la predicción a razón de nuestra impureza que
sucedería, estoy feliz de que nos lleve la marea a diferentes partes, de nada
me sirven ahora las manos, ni ser adulto, ni otra boca que me reprenda por
misógino, no, está a punto de concluir este torrente que apesta y que no es
otra cosa que esos absurdos recuerdos, vámonos, pero sólo como nos conocimos,
con los ojos hinchados y lo demás herido, vámonos, ahora que nos quedan las
piernas y el valor para no rajarnos por la espalda, llegará la calma y con ella
otra historia igual de enferma.
Pasará y entonces tendrás ese miedo que de
niños nos detiene a asomarnos bajo la cama y mirar a la creatura en que nos
convertimos cuando crecemos y las manos nos huelen a adultos, a ese sudor que
se conoce cuando el dinero es una mafia que necesitamos para comprarnos otros
ojos y otras bocas y otras manos de adultos que dañen como daña el alba a los
amantes efímeros los sábado en madrugada, y nos doleremos todo el tiempo, y no
dejaremos de maldecirnos lo que reste de nuestras tristes vidas, sabes algo he
sido sincero y para hoy he cumplido con mi cometido, en otra u otras vidas
espero jamás volver a vernos.
HYPERVERSOS - ELLA ALICIA
HYPERVERSOS - ELLA ALICIA - RADIO UNAM AGOSTO 2015
Ella,
Alicia
Alicia seguía de pie en la última ronda,
balbuceaba boleros, nunca soltó la botella, cerraba los ojos y decía quedito “Happy birthday to you, happy birthday Mr.
Poet” calé una vez más el humo cannabico golpeaba su cara, no había conejo,
no había maravillas, era ella el amor de mi vida que dejé caer en medio de un
océano y tenía como final el resto del universo.
Alicia temía salir a la calle sobria o sin mi
brazo protector marcado por las agujas, a veces lloraba, otras tantas reía, la
demencia bipolar que le marcaba fue lo que logró penetrarme el alma, ella, la
noche, la calle, tanto ron que no sabía si era martes o tenía que robar un par
de espejos para llegar al viernes, Alicia amaba los viernes y no parecía
importarle donde dormir, ni con quien hacerlo… lo importante no es sentirlo
sino olvidarlo, pronunciaba después de cada sorbo o cada bocanada.
Alicia
una maravilla, Alicia clara,
sabor a
coca, hálito de opio,
esencia
barata, Alicia amor eclipse,
pasión
hojalata, Alicia espasmos,
Alicia
demencia suicida,
Alicia
ahora, la cara marcada,
la
greña pinta, ¡shhhhhh!, callada, callada
Alicia corría presurosa por el adoquín y la
lluvia resbalaba a lo largo de su vestido blanco, se detenía de vez en cuando
para apretar el tornillo que detenía la hemorragia de su pierna, gritaba en su
afán de ser salvada de la oscuridad inaudita que la trataba de alcanzar…
Alicia soñaba con ser mujer y no despojo,
domingo por la mañana, la resaca puesta, la carne caliente, las piernas
húmedas, Alicia abría los ojos después de 72 horas de estar en el espacio,
conocía el vacío de su cama, la pestilente bruma de su cuarto, no paró hasta
ponerse de pie, abría un cajón y acariciaba la foto de cuando tenía 7 años, las
lagrimas no cesaron hasta que el acido sicodélico volvía a su sistema, ya no
quería ser mujer sino volar.
Alicia
camina por el bosque de asfalto en busca de una respuesta a la pregunta que
jamás pronunció, apedreaba pájaros de acero con piedras parlantes, juraba que
su padre era un dios Mesopotámico, un fakir de Arabia discípulo de Jesús,
rendía tributo a la muerte por creerse eterna, Alicia comía sal a puños, decía
que el mar oleaba en su vientre, dibujaba paisajes promiscuos con el bao en las
ventanas Alicia tocaba los espejos, los besaba y en contadas ocasiones le hacia
el amor.
Alicia gritaba a la luna y afilaba sus uñas
con la mirada perdida en el horizonte:
Luna
sórdida romanza,
luna
lujuria proterva,
esclava,
silencio, silencio,
háblame
luna barata, escucha el canto
atiende
el ruego, te cambio los ojos,
amante
Voyeur, eres tan puta,
silencio,
¡shhhh! silencio,
El
semen resbala por la rodilla, Alicia no conoce los pecados, grita, versa,
Alicia se unta los labios de acido, se encierra en la bruma, bebe whisky sin
parar, las puntas de su cabello apuntan directo a Dios y al cielo, reta su
poder por creerse santa, Alicia funde las ganas en sus dedos y se acaricia de
forma majestuosa, maúlla, bebe, gime, grita, maúlla, grita, gime, maúlla,
explota, silencio, silencio.
Alicia aparece dormida en el Olimpo, capital
de una ciudad sin ley donde habita el fanatismo a Cristo y el miedo, Alicia
cambia su nombre por coca, forra su piel con piel sintética, se mimetiza en la
noche, baila desenfrenada con ritmos
cadenciosos, agita las manos a media calle, pincha sus pliegues con heroína
barata, mezcla el polvo, Alicia vuelve a explotar y vuela.
No más mariposas, no más té,
no más reina de corazones, no más Alicia…
Alicia
sonríe inquieta,
Juega
con una pelota,
Acerca
sus peones al gato,
Alicia
se mira al espejo tiene ya diez años,
Alicia
viste siempre de blanco,
Alicia
ama a Dios ahora tiene doce.
Alicia
crece, odia a sus padres,
ya
mancho el vestido de carmín,
Alicia
tiene quince se fue de su casa,
Alicia
crece, crece, crece, silencio, silencio,
Alicia
está dormida en una banca del metro,
Alguien
la ha tocado, al despertarse,
Busca
bajo su vestido esta desnuda,
Comienza
a beber…
Alicia
se mira al espejo y escupe su rostro,
Alicia
quedó marcada de por vida,
Crack,
más crack, Alicia se hace pequeña,
Hachis,
Ron, Vodka, Alicia se hace pequeña,
Coca,
ácido, mezcalina Alicia casi desaparece.
Silencio,
silencio…
Alicia está casi desnuda, recostada en la banqueta,
bañada en ajenjo… está por conciliar el sueño… silencio, silencio, Alicia cayó
en un agujero del cuál no regresará.
4 dic 2015
HYPERVERSOS - HIEL Y VUELO
HYPERVERSOS - HIEL Y VUELO RADIO UNAM AGOSTO 2015
Hiel y
Vuelo
Con
los parpados pesados,
y
en espera de algo que no evoque al mal
o
convierta el vino en sangre.
Una
forma de manipular la realidad cannabica,
es
implorar al cielo que corte tus alas
y
te enseñe a matar,
**Estas
son mis manos,
tengo tanta sed,
no te alejes,
mírame directo.
**Estas
bocas que arrancan,
ilusiones infames
ojos predadores
musas que te comienzan a besar.
Y
toman forma de sádicos corazones…
Apunta
bien a la sien,
clávate
directo antes de creer,
júrate
a la cara lo que más yo soy,
pide
clemencia, persígnate al caer,
jode
los rosarios,
no
importa que mañana sea jueves
y
tengas que ayunar,
la
sangre seguirá ahí y estará igual de roja
y
tú serás la misma,
siempre
de frente y serena,
abre
la boca, devórame en varias partes,
¿Sabe
a hiel?
¡¡¡¡¿Sabe
a Hiel?!!!! es el alma…
En esta puta ciudad
en decadencia,
que sigue quebrándose
y el aire
y todo comienza a
despedirse
a desbaratarse
heridos, ¿Tienes miedo?
¡¡¡¡¿Tienes
miedo?!!!!
Mírame,
el mismo bastardo que te busca,
que
llora y pide a Dios,
escúpeme
por imbécil, maldíceme por culpable…
Estoy
de rodillas… puedes comenzar por la sien.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)